El manejo integral de nuestros pequeños héroes con Labio Fisurado y Paladar Hendido incluye procedimientos no quirúrgicos como terapia del lenguaje, Odontopediatría, Ortodoncia, Psicología y Enfermería; y procedimientos quirúrgicos como la Rinoqueiloplastia (cierre de labio), la Palatoplastia (cierre de paladar), Faringoplastia, el Injerto Óseo Alveolar y la Rinoplastia funcional. Todos estos procedimientos buscan mejorar la apariencia y funcionalidad de los órganos afectados como la nariz, el paladar, el labio y demás estructuras.
Hoy nos centraremos en el Injerto Óseo Alveolar, ¿en qué consiste?, ¿cuáles son los beneficios?, ¿a qué edad se realiza?, ¿cómo sé si mi hijo necesita el procedimiento?, ¿cuáles son los cuidados postquirúrgicos? Todas estas preguntas las solucionaremos a lo largo de esta publicación ¡Así que continúa leyendo!

¿Qué es el injerto Óseo Alveolar?
El injerto es un tejido que se separa de su lugar de origen, en este caso de la Cresta Iliaca, para ser transferido a otro lugar donde se beneficiará el paso de sangre. Óseo se refiriere al hueso y Alveolar porque es para llenar el espacio donde solía estar el diente.
Se usa como donador la Cresta Iliaca ya que esta se destaca por ser un hueso resistente a las infecciones debido a su alta celularidad, es óptimo para una rápida curación y se integra mejor.
Hay estudios que demuestran que el éxito del injerto óseo está relacionado con una terapia de ortodoncia previa, por tanto, es recomendable llevar un tratamiento de ortodoncia mínimo de 4 meses.
El procedimiento se realiza idealmente durante la etapa de dentición mixta, previo a la erupción de los caninos (entre los 8 y 11 años). El Ortodoncista y el Cirujano Plástico toman la decisión final con respecto al tiempo para hacer la intervención basado en la posición dental y su estado de desarrollo. La cirugía tiene una duración de 2 horas.
Cuidados Postoperatorios
- Dieta líquida durante las primeras 24 horas y luego dieta suave por 6 semanas.
- Enjuagar la herida con solución salina tibia o enjuague bucal tres o cuatro veces al día.
- El paciente puede comenzar a lavarse los dientes inferiores después de la cirugía. 5 días después puede volver a cepillarse los dientes superiores con un cepillo suave.
- No puede realizar actividad física de contacto por 6 semanas.
- Permanecer con la cabeza elevada para reducir la hinchazón y facilitar el drenaje de la sangre y la saliva desde la boca.
Beneficios:
- Permite el descenso del canino
- Proporciona estabilidad al maxilar
- Brinda soporte al ala nasal que se ve afectada por la ausencia del hueso, preparando así al paciente para la Rinoplastia funcional.
